Jugando y creando soluciones

Piensa en un producto o servicio que te guste mucho, tanto que incluso alguna vez lo hayas recomendado. ¿por qué te gusta?

  Detrás de esa experiencia que vives hay personas que trabajaron para que tu puedas experimentar la sensación de bienestar que te ofrece como usuario.

El Design Thinking es una herramienta de transformación que nos ayuda a pensar de manera distinta la experiencia del usuario y nos ayuda a resolver problemas complejos de manera creativa. Se basa en la investigación de los usuarios, el aprendizaje a través de la experimentación con prototipos y en herramientas de trabajo colaborativo que potencian la creatividad.

  La innovación tiene mucho del comportamiento humano y generar esos espacios requiere que salgamos de la confort zone y en muchas ocasiones solo se necesita saber que se trata de crear algo, por muy pequeño que sea, que impacte sobre una necesidad real de quien usa un servicio o un producto con el fin de hacer coincidir estas necesidades con lo que es tecnológicamente viable.

  El Design Thinking es una forma de pensar, estar en el mundo y vivir. No es una teoría ni un manual sino una forma de afrontar los problemas de manera más fluida. Nos ayuda a entender el valor real que aportamos a la persona que está detrás de ese servicio o ese producto y el valor que aporta al mercado.

  Esta metodología proviene del diseño de producto y se empezó a desarrollar en los años 70’s en la Universidad de Stanford. Es una metodología que podemos aplicar todos en nuestros espacios de trabajo, comunidad y en nuestras propias vidas. Nos enseña a pensar distinto, a encarar los problemas con mucha más fluidez y de manera creativa, ofreciendo una mejora continua en todo lo que se aplica.

  El auge de esta metodología viene dado de generar soluciones en muy poco tiempo y está basado en una profunda investigación del usuario o la persona según  lo que dicen, piensan y viven la experiencia del usuario con el producto. Está centrado 100% en la persona.

  • Empatía

    : Empezamos por lo que las personas, usuarios o consumidores necesitan o quieren hacer. Sus motivaciones y los problemas que buscan resolver. Sin empatía es imposible conocer la necesidad real que tienen las personas y crear una solución a partir de esta

  • Colaboración:

    el trabajo se realiza en equipos multidisciplinarios que aportan sus ideas y puntos de vista. Todas las ideas son bienvenidas y generan un espacio de aprendizaje a las personas que participan en la dinámica de crear algo distinto o mejor para el usuario de su producto o servicio

  • Fuera de la caja

    : Una vez que hayamos entendido el problema vamos a empezar a pensar en las soluciones. Son formas diferentes de encontrar soluciones y pensar más allá o de ver algo disruptivo, algo diferente. En esta etapa dejamos todos nuestros sesgos fuera de nosotros y nuestra propia relación con el producto o servicio y nos centramos en proponer todas las ideas que se nos ocurran. Es una etapa donde jugamos y nos divertimos. Se necesita pensar como lo hace un niño, sin el miedo al qué dirán y compartiendo todas las ideas que surjan.

  • Experimentación

    : Contempla una parte súper importante que es poner a prueba las cosas y permitirse fallar. Fallar es un elemento importante para entender dentro de la metodología, que es importante ver si nos equivocamos y tener la posibilidad de mejorarlo rápidamente. Como la vida misma.

  • Iteración

    : Es entender dónde está la falla e incorporar para que la idea vaya evolucionando con el tiempo. Es importante que nos acerquemos a co crear con el usuario.

  Si existe una disciplina que se renueva todo el tiempo, que aprende, que integra e itera sobre sí misma, es esta. Nos permite reflexionar y desarrollar nuestros procesos, productos, servicios, e incluso identificar lo que ya no funciona. Lo más importante a la hora de aplicar este tipo de herramientas es entender el proceso sobre el cual se pretende realizar un cambio y el objetivo que se quiere conseguir.

  Airbnb es uno de los casos de éxito más emblemáticos de la aplicación de esta metodología. “La empresa ha pasado de ganar 200 euros semanales a revolucionar la industria del turismo” según un artículo publicado en la web de BBVA

  Los resultados han sido tan satisfactorios para la empresa que han propiciado la implementación de la metodología en su día a día, fomentando el trabajo colaborativo y la creatividad de las personas que conforman los diferentes equipos e impulsando la capacidad innovadora del negocio.

  Esta metodología nos permite jugar y crear, como individuos es importante mantenernos en contactos con esta parte nuestra y conocer estas herramientas nos ayudará a aplicarlas para resolver nuestros propios problemas y encontrar soluciones creativas que nos permitan fluir en nuestras propias vidas. 

Autora: Susana Cardozo

Especialista en desarrollo de negocios digitales y experiencia cliente. Apasionada por el aprendizaje continuo, la astrología e ilustración. Ayudo a las organizaciones a desarrollar un entorno centrado en el cliente, utilizando metodologías de innovación, como el Design Thinking.

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